En el Perú, el reparto de utilidades es un derecho laboral que beneficia a los trabajadores del sector privado. Este pago anual se basa en las ganancias netas obtenidas por las empresas que generan rentas de tercera categoría y han registrado utilidades en el ejercicio fiscal anterior. La normativa establece plazos específicos para el desembolso, criterios claros para su cálculo y sanciones en caso de incumplimiento
Plazo máximo para el pago de utilidades en 2025
Según la legislación vigente, las empresas deben realizar el pago de utilidades dentro de los 30 días calendario posteriores a la presentación de la Declaración Jurada Anual del Impuesto a la Renta ante la Sunat. Para el ejercicio fiscal 2024, este plazo vence el 15 de mayo de 2025. Durante este periodo, las empresas están obligadas a calcular, distribuir y depositar las utilidades correspondientes a cada trabajador según los criterios establecidos.
Cálculo de las utilidades: ¿Cómo se determina el monto a recibir?
El monto de las utilidades que corresponde a cada trabajador se calcula en función de las ganancias netas obtenidas por la empresa y se distribuye en dos partes iguales:
- 50% según los días laborados: Se asigna una parte proporcional al número de días efectivamente trabajados por el empleado durante el año fiscal.
- 50% en función de la remuneración anual: Se reparte en proporción a la remuneración anual percibida por el trabajador.
Los porcentajes de utilidades varían según el sector económico de la empresa, estableciéndose entre un 5% y un 10% de la renta neta imponible. Este beneficio aplica a trabajadores en planilla con contratos indeterminados, temporales o a plazo fijo.
Sanciones por incumplimiento en el pago de utilidades
Las empresas que no cumplan con el pago de utilidades dentro del plazo establecido pueden ser sancionadas por la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil). Las multas varían según el tamaño de la empresa y pueden alcanzar hasta S/241.638 en el caso de grandes compañías. Además de las sanciones económicas, las empresas pueden enfrentar intereses moratorios por el retraso en los pagos y posibles demandas por parte de los trabajadores afectados.
Conclusión
El cumplimiento oportuno del pago de utilidades es esencial para mantener una relación laboral justa y equitativa. Las empresas deben estar atentas a los plazos y procedimientos establecidos para evitar sanciones y garantizar el bienestar de sus trabajadores. Por su parte, los empleados deben conocer sus derechos y estar informados sobre los mecanismos disponibles para reclamar en caso de incumplimiento.
Fuente: La República